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Pynchon Community

miércoles, diciembre 22, 2004

Un hombre magnético.

Septiembre de 1768. La primera ópera de Mozart, ese adorable juguete titulado Bastián y Bastiana, se estrena en el jardín de la mansión de Franz Mesmer. Mesmer era médico pero su matrimonio con una rica heredera le permitía dedicarse a otros menesteres, como organizar veladas musicales a las que asistían el maestro Haydn o el niño prodigio de Salzburgo.

Pero se enteró de que una paciente se había curado de una úlcera con un imán y volvió por los caminos de la medicina. De su personal medicina. Obsesionado por el asunto, elaboró la teoría del magnetismo animal. Mesmer creía que existía un fluído magnético interconectado con cada uno de los elementos del Universo. Los desequilibrios en ese fluído porvocarían la enfermedad. Por lo tanto no había más que equilibrar los fluídos para recuperar la salud. En un principio, el médico milagroso conseguía su cura gracias a imanes o a una solución de hierro, pero con el tiempo bastaron sus manos.

Sus increíbles curaciones hacen que su fama como médico sea todavía mayor que la que un día tuvo como mecenas musical. Respetado en un principio por colegas y poderosos, es incluso reclamado por el Elector de Baviera para que demuestre en Munich su magnética sabiduría. De allí marchará a París donde recibirá a nobles y burgueses que viajan de todo el mundo para ponerse en sus sanadoras manos.

Pero tan milagrosas curaciones despiertan las sospechas de muchos. Tanto que Luis XVI organizó una comisión para estudiar el mesmerismo. El informe era un mazazo científico contra las teorías de Mesmer. Quedó total e irremisiblemente desacreditado.

Criticado y repudiado por los científicos que un día le ensalzaron, vuelve a Alemania. Su conocimiento de ese fluído magnético que todo lo interconectaba, no le servió para equilibrar de nuevo las fuerzas de la fortuna en su favor.

Se acabaron los tiempos de las glorias científicas y de las veladas musicales. Pero para el futuro su nombre quedaría unido a una nueva palabra: mesmerismo (Y a un capítulo de Mason & Dison)